Maceración en tanques de acero inoxidable, con grano entero, cuatro días a bajas temperaturas antes de la fermentación con agregado de enzimas y pellets de hielo seco. Fermentación alcohólica: se trasegó el mosto tinto a barricas nuevas de roble para su fermentación ubicadas en cavas climatizadas. Finalizada la fermentación alcohólica, se realiza la fermentación maloláctica en forma espontánea en las mismas barricas. Presenta a la vista un profundo color rojo bordo, con destellos violáceos muy vivos e intensos. En nariz, aromas a violetas se combinan con frutos rojos y negros como ciruelas, guindas y arándanos. Su fermentación en barricas de roble aporta una persistente estructura en boca y delicadas notas de moka y chocolate blanco, lo que lo convierte en un vino complejo y agradable.